Poemas en la noche



Haciendo camino

Sentirse violado por las miradas,
¿obsesión o realidad?.
No aguantar una simple caricia,
no aguantarla, sin más.
Contagiarse del deseo prohibido,
soportarlo en soledad.
Consintiendo ciertos abusos,
consintiéndolos por necesidad.
Sumergirse en melancolía,
convivir con la infelicidad.
Convertirse uno en paloma,
convertirse uno en oscuridad.
Dejarse llevar por el destino,
alzando el vuelo de la verdad.
Despistarse en medio del camino
bajo los aromas, en libertad.


Horas en blanco

Horas bajas, basta llanura,
en ellas me encuentro
otra vez.
Risas falsas, noches púrpura.
Sólo y perdido
en la ciudad sin ley.
Hojas blancas,yerma blancura.
Hojas en blanco, desierto de papel.
Risotadas, gente absurda,
el odio que despierta al pecado,
ese que nos expulsa
fuera del jardín del edén.


El engaño de la vida sin muerte

¡Vida!
¿que es vida?,
vida soy yo,
vida son los campos,
las flores,
vida es tu corazón.
El mar es vida,
también el sol.
Y siendo todo vida,
la muerte no es más
que pura transición.

 
Perdido en el camino


Me pierdo,
¿a donde voy?,
¿alguien sabe donde estamos?,
¿quién sabe donde estoy?.
Me pierdo,
¿algún día volveré?,
el día menos pensado
...resucitaré.


(prosa)

El niño que carece de amor
es capaz de hacer cualquier cosa,
lo que sea.
La educación de hoy en día es un fraude.
Mi alma llora,
como si se le hubiera muerto
un ser querido.
En realidad es por mí
por quien llora mi alma.
¿cuando volveré?
¿quiero volver realmente?.
...


Tres en uno


Lo que Dios ha puesto
en mi camino.
Lo que el Destino ha puesto
en mi camino.
Lo que el Azar ha puesto
en mi camino.
Todo es uno,
y ese uno
lo es todo.

Amigo de la verdadera inspiración


No quiero escribir
por vanidad,
yo quiero escribir
por pasión.
Alguna noche,
mirando al cielo,
logro vislumbrar
quién realmente soy.


Océano de desiertos


En este vil océano
en el que feraz
me adentro,
solo observo islas yermas,
solo observo
unidades sin criterio


Un beso


El beso de una chica,
cuando lo sientes
es cuando te das cuenta
de que lo necesitas.


Papa


¡Haber hombre!
Déjame vivir la vida
en paz,
¿no te das cuenta?,
quiero escoger yo mismo
mi realidad.
Ya se identificar
tus atentados a la ilusión,
¿en que momento
te dejaste guiar
por el estado de ánimo
de la decepción?.
Yo quiero luchar
por cada uno de mis sueños,
y seguir luchando y luchando,
sin temer fallar,
hasta que se acabe en verdad
mi tiempo.


Las dudas del caminante

En la vida de un hombre
existen un número ilimitado
de dudas,
pero cuando tienes en frente
los ojos de la mujer que amas
te das cuenta
de cual es el verdadero
camino del hombre.


Ollada esteril

Miña querida mirada,
estáncase contaminada,
e os peixes que chegan
quédanse atoados sen diciren nada.
Lascivia propia do galán,
do falso galán,
mestura enturbiada
sen semente nin afán.


El miedo del ser 

 
El miedo de ser quien soy
se arrastra por mi frondosa mente,
es un querer y no poder
dejar de cabalgar la serpiente.
El miedo a no afrontar mis temores
se mezcla entre mis neuronas,
pienso que estoy rodeado de gente,
pero al momento abro los ojos
y estoy a solas.
Me inunda un mar de malas sensaciones,
me imagino que estás en frente,
recuerdo lo bien que me siento contigo,
y ahora si, vuelvo a mirar al frente.
El miedo a no afrontar mis temores
se arrastra por mi frondosa mente,
es un querer y no poder
dejar de cabalgar la serpiente,
el miedo de ser quien no soy
se mezcla entre mis neuronas,
pienso que estoy rodeado de gente,
pero al momento abro los ojos
y estoy a solas.
Cuando tengo malas sensaciones
te imagino que estás en frente,
recuerdo lo bien que me siento contigo,
y ahora, por fin, vuelvo a mirar al frente.


Allá en el horizonte


Detrás de las montañas
allí donde mi visión no llega
se esconde un mundo de sentidos,
sentidos hoy marcados por mi indiferencia.
Cansado de tantos giros,
cansado de tantas vueltas,
ambiciono un estado tranquilo,
y me decepciono por no darle presa.


Contradicción, o no


Yo no soy religioso / Yo soy religioso

yo creo en dios / yo no creo en dios


Libertad

La libertad no mora
en la ausencia de barreras,
sino que habita
en nuestra reacción
ante dichas limitaciones.


Anhelo insatisfecho

Cuando creo que me escapo
de la vida mal vivida,
un tornado de falsos gestos
derriban mi motoncito
de calma conseguida.
Cuando creo que he ganado
en la carrera de la mala vida,
siempre tropiezo con viejos pretextos
para no cuidar
con esmero mi semilla,
y así, poder recoger el fruto
y salir de la melancolía.
Pero confío en mi mismo...
confío en la fuerza de voluntad...
confío en el destino...
sí, confío en llegar a la verdad...


Bendita adolescencia

Hay veces
en las cuales el mundo
se me viene encima.
Hay veces
que sueño que este mundo
se convierte en ceniza.
Empiezo a correr
sin un rumbo fijo,
lejos de toda creencia ajena,
me subo a lo alto del monte
a contemplar las estrellas.
Donde ya no pueda escuchar
tantas órdenes sin sentido,
si que las conoces,
yo las llamo órdenes por vicio
que terminan, sin remedio,
en el baúl del olvido.
Hay veces,
cuando todo carece
de sentido.
Hay veces
en las que el cielo
se desvanece con sigilo.
Cortar las ataduras
de esta moral cristiana
que tanto nos joden la mente
con contradicciones y farsas.
Dejar atrás los prejuicios sociales,
habladurías y cotilleos,
lo único que hacen es
acercarnos mas a la línea de fuego.
Despojarme de las ropas
con las que la moda
nos ensucia el cerebro
y sentarme desnudo,
a solas con Migo Mismo
para contemplar el cielo.


Indiferencia, transformación


Hoy acepto la alegría.
Hoy, la persistente niebla
que yacía posada
sobre mi cabeza,
me ha dejado
en un soleado día
de la fértil primavera.
“Hoy me siento encima
de las nubes,
para ver pasar aviones
cargados de maletas,
observando a los pasajeros
atascados en su destino,
cariacontecido yo
por tanta indiferencia”


En este tiempo decadente

Mi cabeza se contagia del rumor
que desprenden tus caderas
y se eleva por entre las nubes
olvidando los tiempos de tormenta.
Tanto loco suelto
aliado de la justicia,
tanto y tanto miedo
sirviendo a tanta mentira.
Cuanto engaño, cuanta envidia,
cuanto dolor, cuantas guerras sin salida.
Yo pensaba en el suicidio
para despertar de una triste pesadilla.
Tanta corrupción
hija bastarda de la abaricia.
Bendita depresión
símbolo nacido de la incompetencia.
Santa represión,
avenida del afán de pertenencia .
Los violadores de lo ajeno,
simples perversiones de la abundancia.
Cuanto violento
fiel amigo de la locura.
Tanto dejamiento, tanta estafa,
tanto enfrentamiento, tanta tortura,
cuanta gente sin un verdadero sueño.
¡Atrevete a volar por encima
de toda esta basura!


Elección vital


Yo escojo el dulzor
de la delicia amarga,
cruel y sencillo sabor
de la esperanza.
Afianzado en la elección,
ojo avizor
de sus consecuencias,
más me adentro
en su recóndito interior
con pocos pasajeros
sin billete de vuelta...
...Me refiero a vivir
en busca de un sentido,
búsqueda voluble y vulnerable,
que se antoja a cada paso
infructífera, sin motivo.
...Me refiero a reconocer
los buenos momentos comprendidos,
momentos para la mente irracionales,
que nos sitúan
en un presente continuo.
...Me refiero a no desistir,
ni abandonar a nuestro espíritu
en la flaqueza de los miedos
ni en los desdenes
del destino.
Abramos las puertas,
abrámonos a la percepción,
preparémonos para profundizar
en el caldo primitivo
de la felicidad;
esa irónica canción.


Pasar por el puente


Me siento débil,
no puedo dormir.
Me siento frágil,
quiero irme por fin.
Dejar esta ciudad
cansada y demente,
dejarlo todo
para beber de otras fuentes.
Encontrar a esa persona,
despejarme el horizonte,
sin miedo a tropezar
contra el primer
bache que encuentre.
Procurando no mirar atrás,
manteniendo la vista al frente,
y siempre decidiendo
si cruzar el río a nado
o pasar por el puente.


La balanza


Ojos verdes,
ojos azules,
ojos castaños
marcados por la esperanza.
Ojos fieles,
ojos sinceros,
ojos que te miran
con indiferencia.
Ojos negros,
esos ojos tuyos
deseosos y necesitados
de confianza.
Ojos tiernos,
ojos marginados,
ojos que necesitan
el secreto de la experiencia.
Ojos presuntuosos,
ojos enloquecidos.
Miles de ojos
en un mundo
en el que se está
rompiendo la balanza.


Muerto en vida


Vivo enfermo de esperanza,
quiero decir que yo vivo
acallado por lo escrito,
púgil muerto en su constancia.
Vivo muerto, muero vivo,
vivo enterrado en silencio,
muero a cachos esperando.
Espero lo indefinido.
Lo indefinido, altavoz
que percute en mis entrañas.
Lo indefinido, martillo precoz;
¡Rompe las piezas de mi muralla!
Contar las olas quiero,
esas que llegan a mis pies.
Aguardar el momento justo
en el que todos
echarían a correr.
Contar las horas por miedo.
Temores enterrados en el ayer
me obligan al desconsuelo,
y cayendo al vacío
reprimo mi desnudez.


Cuesta abajo


Y ahora dudo
de todo lo que existe.
La seguridad
que me embargaba
hace cinco segundos
se ha convertido
en niebla triste,
incómoda y espesa,
y yo en un vagabundo


Elefante de gemidos 

 
Cien palabras,
elefante de gemidos.
Cien palabras,
asesinato sin testigos.
Cien palabras, diez palabras,
una palabra, cero.
Cero palabras es la respuesta
para salir del laberinto.
Las palabras aturden al alma,
la enfrían, la enturbian, la desvelan.
Las palabras mecen al ciego, en la noche,
consiguen que se entretenga.
Menos palabras y más...
estos puntos suspensivos
serán lo que tu quieras.
Convierte pensamientos
en acciones bellas.
Condena al fracaso
el origen de tus penas.
Convive con mendigos,
seduce a las princesas
que anidan en tus sueños
como "simples" barrenderas.
Conviertete en silbido,
transformarte en tormenta,
y destroza a los inacabados
con el don de tu certeza.

Gitano de corazón

Tristeza, alegría,
que más da.
Llorarle o sonreirle al día,
que más da.
Llorar con alegría,
sonreir con tristeza,
que más da, que más da...
Sentir la bulería,
cantar por soleá,
desnudarte sin prisa,
desnudar tu virginidad.
Encontrarme con la vida
camino de ningún lugar.
Embarazarme de la armonía
que desprenden las olas del mar...

Mundo enfermo

En un mundo enfermo
¿cómo aguantar la contaminación?
¿cómo asumir tanto sufrimiento?
¿cómo vivir con la desesperación?.
Un niño, una leve sonrisa,
un par de besos, una canción.
Deambular como el viento, saltar de alegría,
mirarte a los ojos, abarzarte con pasión,
amanecer lento, desnudarte sin prisa,
sonreirle a la mañana, correr por vocación.
Disfrutar de la luz del día,
disfrutar del calor,
alegranos la mañana
con un leve revolcón.
Convertirse uno en brisa
compenetrarse con el sol,
desembarazarse con una finta,
olvidarse de la presión.
Contagiarse de la risa,
contagiarse, ¿por qué no?
dejarse caer fuera de la melancolía,
atreverse a aceptar el perdón.


De noche


En las noches oscuras
siempre existirá una luna
que nos recuerde
que existe un sol.
Habrá noches
en las que el cielo esté nublado
y ni si quiera podamos ver a la luna.
Aún así sabremos en nuestro interior,
que ella está iluminando el infinito.

El masoquismo como terapia

Sufrir aumenta nuestra capacidad
para sentir.
Y a su vez, nuestro afán por sentir
aumenta nuestra capacidad
para sufrir.


Mudo


Me gustaría ser capaz
de decir lo que siento.
Pero no me siento capaz de decirlo.


Arde el cielo

El cielo está rojo,
víspera de desgracia.
 

Los perros no ladran,
los gatos sueñan con princesas.
La gente pasa,
yo me quedo en casa.
 

La gente me sonríe,
con cara de chiste,
y yo sentado,
me encojo de brazos.

Sintiédolo mucho,
me quedo con lo puesto,
unos dirán; ¡está jamao!
¿que hace este tío disfrazao?


Todo lo que no soy

No soy un buen hijo,
no soy un buen hermano,
no soy buen estudiante,
no soy trabajador.
No soy buen amigo,
no soy un buen hombre,
no soy lo que se debe de ser,
no soy lo que se espera de mi.
Soy yo, profundamente yo.

El dictador

Hoy en día vivimos
en una prisión
de muros invisibles.
¡Sí!
tú también estás dentro,
aquí todos somos prescindibles.
La ciudad nos obliga
a este juego del perro y el gato,
hoy hasta los pueblos
se han convertido en ciudad,
¿entiendes algo?.
Y mientras el sol
nos bendice con sus rayos
la gente se toma el café en el bar
desperdiciando la vida trago a trago.
Las discotecas son vertederos
de gente que viene y va,
sal afuera y observa a la luna,
escucha lo que cuenta,
y luego decide
si quieres ser uno más.
Un sin fin de instrumentos
tocan la banda sonora
de nuestras vidas,
unos tocan en directo,
y otros lo parece,
el engaño es perfecto.
¡Ten cuidado!
suenan de maravilla,
te acostumbras a su sonido,
a sus melodías.
¡Ten cuidado!
o acabarás vitalmente sordo,
escuchando sólo sus ritmos,
escuchando ecos sonoros.
Entonces un milagro podrá salvarte,
sólo un milagro podrá salvarte.
Tú decides, tú eres el director,
tú tienes la barilla
con la que elegir y descartar.
Tú decides, aún estás a tiempo,
a tiempo de cambiar,
simplemente ama la vida.
Que no te hagan callar.

Ahora lo entiendo

La vida me sorprende de nuevo,
el interior abismal
que contiene mi existencia
ya no ofrenda sufrimiento a mis amadas.
Ya no entrego mi dolor a la mujer
en forma de silencio.
No, ya no riego mi dolor,
mi acrisolado dolor, mi dolor.
Largo tiempo, yertas costumbres,
nubes grises y espesas,
han vagado por mi alma,
hasta que por fin lo he comprendido.

El sueño

Los sueños son el espejo
de la realidad de cada uno.


El dictador dice:

Pensad lo que queráis, pero haced y decid
lo que yo os diga, ¡o si nooo .....!!!


Renacer

Tanto suspirar,
tanto bomitar, (el pensar)
tanto remover
en la in(consciencia) del ayer.
Volver a ser amigo
de uno mismo.
Volver a cantar.
Volver a sentir el calor,
sin espejismos.
Sentir y confiar.


Latiendo mi corazón

Latiendo mi corazón,
los pensamientos se arrastran
sumergiéndose en el océano,
océano de mis entrañas.
Latiendo mi corazón,
los pensamientos se retuercen
encendidos por el alcohol,
alcohol que ya no me calma.
Vencido por el desamor,
fruto de mi resentimiento,
voy almacenando los años,
años que estoy perdiendo.
Perdido, arruinado y solo.
Solo, arruinado y deprimido,
reprimo mi alma, vacilo,
resoplo, buscando un alivio.

El guerrero

Antes solía profundizar
en el océano vital de las personas
a través de sus ojos.
Esperaba encontrar tesoros perdidos,
esperaba encontrar verdades ocultas.
Pero sólo encontré piratas provistos
de un parche en uno de sus ojos,
y una espada en el otro.
 

Pobre del que vaga por el mundo
sin una espada afilada en una mano,
y un escudo en la otra.
Pobre del que vaga por el mundo
con las piernas atrofiadas
por la inactividad,
careciendo así de la finta y el engaño.
Pobre del que vaga por el mundo
sin una armadura recia
capaz de amortiguar los golpes
que no se pueden esquivar.
Y pobre del que vaga por el mundo
en posesión de todas estas virtudes,
aferrádose a ellas,
olvidando que su naturaleza es
la desnudez carnal
y la evolución espiritual.


Mujer


Mujer, tu belleza se ve marchita,
¿cuando y por qué
dejaste de saborear
el frescor de la lluvia?
¿cuando te dejaste absorver
por la inerte presencia
de un sol extranjero a tu naturaleza de río,
de fuente, de manantial?.
¿En qué momento te convertiste
al ateísmo de tu propia fe?,
desdeñando con tu no mirar
todo lo que florecía, y florece
por puro placer.
Me imagino que, al igual que la mayoría
caíste en el engaño del mando a distancia,
de la apariencia,
de las imágenes capturadas por un ojo
que nadie conoce, pero que todo lo ve.
Caíste en el engaño de ese voayeur divino,
que existe a fuerza de nombrarlo,
día a día, hora a hora, pensamiento tras pensamiento,
fracaso tras fracaso.
Bendita omnisciencia, bendita demencia,
muerte al paraíso postergado.
Me imagino que, al igual que la mayoría,
caíste en el influjo de las piedras del camino,
y te babndonaste a la muerte
de lo políticamente correcto,
ahogando los latidos de una vitalidad
que te proponía jugar a lo desconocido,
a lo inexplorado.
Porque tu ser es un terreno de capacidades infinitas, eternas.
Porque tu existencia es un crisol
de experiencias no inventadas hasta tu llegada.
Porque toda tú eres eterna,
porque toda tú eres indefinida.
Porque el amor te pertenece,
y la felicidad, y la participación consciente.
Porque todo te pertenece,
y nada te pertenece.
Porque eres un flujo de contradicción,
porque la vida es contradicción, contraposición,
un vaivén de intereses necesarios.
Por eso me gustas mujer,
  porque eres igual, y diferente
  al mismo tiempo,
  porque no te conozco, pero se quien eres.
  Porque a veces te reconozco,
  y otras me pierdo, y desando lo andado,
  pero siempre aprendo.
  ¿Por qué tu beleza se ve marchita mujer,
  cuando y donde lo permitiste?


 Vieja amiga


Pobre y perturbada oscuridad,
hecha locura por los destellos
de una luminaria escondida
en un cajón tallado
a base de plegarias y ruegos.
Tu naturaleza presente
no es más que una quimera
preñada de logaritmos
basados en el miedo,
logaritmos basados en la ausencia.
Tus alas, que antaño
se antojaban expléndidas,
tornaron su majestuosidad
en vacuidad anoréxica.
Simplemente cerraste tus ojos internos,
y desenterraste con tu odio
dos hachas de madera.
Una para romper el tedio
en el que se sumerge tu existencia,
y la otra, para los días
en los que el gentío
acosa tu alterada conciencia.

A la deriva

Gobernado por pensamientos
de dudosa procedencia
mi barco zozobra
en el mar de la existencia.
Anclado en un vacío aparente,
desierto fue mi pasado.
Desaliento de mi presente
son las huellas de un sol poniente.
El timón, años y años
obviado, sin oficio,
se acostumbró a vivir entre las olas,
se acostumbró a vivir entre el peligro.
¿No aparecerá en mi vida
una estrella quevenga para quedarse?
Que despierte del fugaz zigzageo
serpentino de la vida limitada
por ese mismo ir y venir,
y no quedarse.


Eterno Retorno

 
Cuando todo pase, podré dormir,
el huracán y la noche,
el desierto de sábanas blancas,
y la ceguera sin fin.
Cuando todos duerman,
y yo con ellos,
aliviaré mi luto,
sí, podré dormir.
Cuando todos y todas,
en un círculo concéntrico,
hallemos la calma,
seremos libres, libres y eternos.
Seremos como las hojas
que caen de los árboles
y se encuentran en el suelo,
y después un bosque en paz.
Seremos como el frío de la noche,
como un pájaro que vuela,
como el sol que calienta,
seremos puros locos de atar.
Espejismos y sociedades,
puntos suspensivos, puntos y aparte.
Nacionalismos, suciedades,
gentes sin futuro, ejércitos del aire.
Crearemos un nuevo día,
y con él, su noche correspondiente,
crearemos nuevos dioses,
y por debajo, susurros entre la gente.
Creeremos en mil y una historias
contandas por una lengua sin frente,
mataremos a los niños,
mataremos también a sus verdades.
Andaremos de nuevo perdidos,
en verdad perdidos y vulnerables,
y viviremos preguntando al cielo;
¿podré dormir cuando todo pase?.

La vida como aprendizaje de algo más

 
Estoy aprendiendo;
la vida es un juego,
trasiego de intereses
en el cual siempre pierdo.
Conciliando mis virtudes,
despertándolas del sueño,
asimilo viejos fracasos,
acostumbrándome a los nuevos.
Siento que todo pasa,
y que nada queda en pie,
que la risa es una farsa
cuando a tu lado alguien se muere.
Vuestro amor es una farsa,
un invento de la mente,
¡nos hace creer que volamos
convirtiéndonos en fieles creyentes!.

Afuera llueve

Afuera llueve,
es el típico chaparrón,
así me encuentro ahora
guarecido en mi habitación.
Necesito hablar de cosas
transcendentes, constantemente,
ya no se bromear, ni reir,
ni llevarme bien con la gente.
Convierto me envidia
en crítica hacia las personas,
envidio todo aquello que poseía,
todo lo perdido con la aurora.
Y así van pasndo mis días,
con sus correspondientes noches,
buque que arremete con su ira,
experto en el arte del reproche.
Deseo que llegue la anarquía
a mi mundo cargado de resortes,
insurgencia en los semáforos
que controlan mi horizonte.

Soledad

Soledad, impúdica guerrera,
sentimiento amrgo,
sedienta compañera.
Soledad, como un trago largo,
que se convierte en sirena,
y con sus cantos nos enreda.
Sonidos desenfocados,
palabras ciegas,
en un mundo de esclavos,
imágenes de referencia.

Improvisación

Un ordenador encendido.
La luz del flexo ilumina
creando una penumbra agradable.
El último de la fila
suena en la radio,
sonidos que embriagan llanuras.
El vino, de los baratos,
llena un vaso de cantina.
El cigarro ya no humea como antes,
pero guarda el calor primigeneo
que alcanzó la combustión.
La ropa tirada por el suelo
alimenta la falta de aire,
aire viciado, angustiado,
que busca renovación.
Ahora suenan pájaros de barro,
visión de muertos vivos.
Letras de una imaginación alerta,
y de unos brazos cosidos.
Tanto tienes, qué vales,
si fumas tabaco de liar
no entres en las islas, no son para ti,
tú naciste para volar.

Quién soy yo?

¿Quién soy yo, quién?,
¿soy un músico, un poeta...?
soy un buscador de la verdad,
tan capaz de la hermosura
de un vuelo de gaviota,
como de la fealdad
de un gato sin fortuna
aplastado por una rueda
en carretera de ciudad.
Soy medio consciente,
medio inconsciente.
Soy un centro esparcido
que anhela el recogimiento
y la iluminación.
Soy un medio inconsistente
que anhela todo aquello
que no posee.
Soy tan claramente puro deseo,
que incluso deseo el no poseer,
que incluso deseo el no desear,
que incluso sueño que no te deseo.
Soñar y desear,
esa es mi enfermedad.
Soñar y desear,
ambas me convierten
en un pobre ciego.



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